Hoy fue la misa de partida definitiva de Deniro Sánchez, y las palabras del parroco tocaron profundamente mi corazón y entendí una gran verdad: "Dios es más grande que todas las cosas"
Nada es más grande que el, ni trabajo, ni carro, ni casa, ni nada que se pueda comparar con su amor, quizás por no entender esta realidad andamos por la vida con tantos miedos, con tantas frustraciones y engaños, que nosotros mismo ponemos en nuestros corazones, pensando que nos aliviaran por un momento de todos los males del mundo, pero en realidad no es así, todo pasa más su amor no pasará, y si nos aferramos con fervor a esta gran verdad de libertad, creo que nuestra actitud sería definitivamente diferente.
Todos nosotros fuimos jovenes, invencibles, testarudos, pero que duro es tener que escuchar la voz del Señor de esa forma, a veces como andamos ciegos, sordos y mudos por la vida, necesitamos un " remeneon" para poder escuchar lo que Dios nos trata de decir. A veces perdemos a nuestra pareja, a nuestro amigo, a nuestro hermano, por no colocar a Dios en nuestras vidas, pues Dios funciona como un colador, como un rebote que no permite que ofendamos al hermano, que no juzguemos a nuestros compañeros de trabajo, que no hagamos mal a los más débiles.
En fin, Dios no nos deja solos en ningun instante, nosotros mismos le damos la espalda, porque creemos que somos tan magnificos, tan bellos, tan unicos, que nos olvidamos que el nos hizo a su semenjanza, quizas si hubiese querido, nos hubiese hecho con un ojo, 3 oreja, el cabello verde, 5 pares de pies, y quien sabe que cosa mas y sin embargo nos regalo su imagen, que regalo más bello y no solamente eso, sino que envió a su único hijo, lo manda a sacrificar a estar tierra, por amor a nosotros.
Hoy es un día de tristeza para todos aquellos que conocieron a Deniro, para nosotros como familia también es muy difícil, pero entendemos que todo ha sido voluntad del Señor, pues nuestro pequeño entendimiento humano no lo asimila, pues todo obra para bien...
